En el Valle de Camisas esperan que Minera Los Pelambres pueda entregar certezas de que
nuevo derrame del concentraducto no afectó sus sistemas de Agua Potable Rural tras ser
vertido en piscinas contiguas a sus pozos.
Milena Báez, exconcejala y dirigenta del valle, advirtió que este no es un hecho aislado:
“No es un hecho fortuito ni aislado. Hace dos meses ocurrió exactamente lo mismo y
también se tuvo que echar relaves a una de las piscinas que está acá en el valle de
Camisas. Anteriormente, en 2021, también tuvimos el mismo conflicto con Minera Los
Pelambres: se echó relave a las piscinas de Camisas y esas piscinas acusaron filtración. Se
hizo un paro como de dos meses para llegar a acuerdo con Minera Los Pelambres porque
aguas abajo, en el mismo estero de Camisas, están los pozos de agua potable de El
Arrayán, Palquial y de Colliguay. Entonces, el riesgo de que se filtren las piscinas para
nosotros es un riesgo de tener aguas contaminadas”, sostuvo.

El senador Daniel Núñez participó en una asamblea con las comunidades afectadas y exigió
respuestas inmediatas: “Acá hay un aspecto central: Minera Los Pelambres, una vez más,
tiene un incidente que genera contaminación y que pone en riesgo la salud de los
habitantes. Lo que ellos quieren es certeza de que no hubo filtración desde las piscinas
aledañas al concentraducto y que estas no afectaron los pozos de agua potable rural.
Estamos hablando de la salud de las personas, del acceso al agua, un derecho humano.
Hasta ahora no ha habido respuesta de Minera Los Pelambres a estas demandas”.
Núñez agregó: “Quiero solidarizar con los pobladores y de una vez por todas exigir que
Pelambres se haga responsable ante los conflictos ambientales que provoca, y que tienen
en alerta a todas las comunidades de estos sectores de la comuna de Salamanca”.
Por su parte, la diputada Nathalie Castillo planteó que es urgente tomar medidas:
“Queremos que los pozos de agua, y principalmente los APR, tengan todos los estudios
necesarios para poder garantizar el consumo humano del agua y también del regadío que
realiza la agricultura familiar campesina de la zona”, afirmó.
Castillo fue enfática en responsabilizar a la empresa: “Acá no se trata solamente de un
evento aislado. Estamos frente a una falta de responsabilidad sistemática de la empresa,
que debe mejorar, modernizarse y tener un trabajo real y efectivo ante las eventualidades
que surgen de las operaciones mineras en los territorios y comunidades campesinas”.
